Si estás planeando un viaje a París, subir a las torres de Notre Dame es una visita obligada. No solo por la belleza arquitectónica del edificio, sino también por las increíbles vistas panorámicas que se pueden disfrutar desde lo alto. En este artículo, te contaré todo lo que necesitas saber sobre subir a las torres de Notre Dame, desde cómo llegar hasta qué ver una vez arriba. ¡Sigue leyendo para descubrirlo todo!
Para llegar a las torres de Notre Dame, lo primero que debes hacer es ubicar la catedral en el mapa. Notre Dame se encuentra en la Île de la Cité, una isla en el centro de París, y es fácilmente accesible en transporte público. Puedes llegar en metro, bajándote en la estación Cité (línea 4), o en autobús, con paradas cercanas a la catedral. Una vez que llegues a la Île de la Cité, solo tendrás que seguir las indicaciones para llegar a la entrada de las torres de Notre Dame.
¿Cuál es el horario de visita?
El horario de visita a las torres de Notre Dame varía según la temporada.
En temporada alta (abril a septiembre):
Las torres están abiertas al público de lunes a viernes de 10:00 a 18:30, y los sábados y domingos de 10:00 a 19:30.
En temporada baja (octubre a marzo):
El horario se reduce, con apertura de lunes a viernes de 10:00 a 17:30, y los sábados y domingos de 10:00 a 17:00.
Para que tu visita a las torres de Notre Dame sea lo más agradable posible, aquí tienes algunos consejos:
Llega temprano:
Para evitar largas colas, es recomendable llegar temprano, especialmente durante la temporada alta. Así tendrás más tiempo para disfrutar de las vistas sin tener que esperar demasiado.
Lleva calzado cómodo:
Subir a las torres de Notre Dame implica caminar bastante y subir escaleras, así que asegúrate de llevar calzado cómodo para la visita.
Prepara la cámara:
Las vistas desde las torres de Notre Dame son impresionantes, por lo que querrás capturarlas en fotografías. Asegúrate de llevar una cámara con batería cargada y espacio suficiente en la tarjeta de memoria para no perderte ninguna foto memorable.
Una vez que hayas subido a las torres de Notre Dame, podrás disfrutar de unas vistas espectaculares de París. Desde allí, podrás ver algunos de los puntos más emblemáticos de la ciudad, como la Torre Eiffel, el río Sena, el Museo del Louvre y mucho más. No te olvides de disfrutar del impresionante trabajo arquitectónico de las propias torres de la catedral, con sus famosas gárgolas y las campanas.
Subir a las torres de Notre Dame es una experiencia que no te puedes perder en tu viaje a París. Desde las vistas panorámicas hasta la belleza arquitectónica, la visita vale completamente la pena. Así que no lo dudes y añade este plan a tu itinerario en la Ciudad de la Luz.