Visitar Praga es una experiencia fantástica, pero no todo el mundo conoce las maravillas que se encuentran en las ciudades cercanas a la capital checa. Es por eso que considero importante hablar de las ciudades cerca de Praga para visitar, ya que estas localidades tienen mucho que ofrecer a los viajeros que buscan descubrir más allá de la ciudad principal. A continuación, te hablaré sobre algunas de estas ciudades y por qué son tan interesantes para incluirlas en tu itinerario de viaje por la República Checa.
Situada a unos 70 kilómetros al este de Praga, Kutná Hora es una ciudad que tiene una rica historia relacionada con la minería de plata. Su centro histórico está declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, y no es para menos, ya que cuenta con monumentos impresionantes como la Catedral de Santa Bárbara y la Capilla de Todos los Santos, cuyo interior está decorado con huesos humanos. Sin duda, Kutná Hora es una ciudad llena de encanto y misterio que merece la pena visitar.
Tábor: la ciudad fortificada
Tábor se encuentra a unas dos horas al sur de Praga y es conocida por su impresionante casco antiguo, rodeado por murallas y torres medievales. Esta ciudad fortificada tiene una atmósfera única, con calles adoquinadas y casas de colores que la hacen parecer sacada de un cuento de hadas. Además, Tábor es famosa por su historia como bastión de la comunidad husita en la Edad Media, por lo que los amantes de la historia encontrarán en ella un destino fascinante.
Karlovy Vary: el paraíso de los balnearios
Ubicada al oeste de Praga, a unas dos horas y media en coche, Karlovy Vary es famosa por sus aguas termales y sus lujosos balnearios. Esta elegante ciudad es perfecta para relajarse y disfrutar de tratamientos de spa, así como para pasear por sus hermosos parques y probar las aguas minerales que brotan de sus fuentes. Además, Karlovy Vary es escenario de un prestigioso festival de cine, lo que la convierte en un destino lleno de glamour y encanto.
Český Krumlov: el tesoro medieval
Esta ciudad, ubicada al sur de Praga, a unas dos horas y media en coche, es otra joya del patrimonio checo. Český Krumlov está dominada por un impresionante castillo que se alza sobre el río Moldava, y sus pintorescas calles empedradas están llenas de edificios renacentistas y barrocos perfectamente conservados. No es de extrañar que esta encantadora ciudad sea otro sitio declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, ya que pasear por sus calles es como retroceder en el tiempo.
Estas son solo algunas de las ciudades cerca de Praga que recomiendo visitar en tu viaje a la República Checa. Cada una tiene su propio encanto y ofrece una experiencia única que complementará a la perfección tu estancia en la hermosa ciudad de Praga. ¡No te arrepentirás de incluirlas en tu itinerario!
